Joan Codolar trabajó como relojero profesional en Suiza durante más de 20 años, reparando.

El tiempo de las piezas diminutas ha acabado para él.

En las sierras de Córdoba, inspirado por los materiales en desuso, Joan retomó la soldadura y se entregó a la misión de darle un sentido a lo olvidado.

Con un gran sentido del equilibrio, Joan transforma lo desechado en un lenguaje, un ensamble sugerente de piezas
que como una oración nos cuenta sobre la mirada estética y sugerente de Codolar.

La chatarrería se convirtió para él en su mundo inspirador.

La verdad en el tiempo de la herrumbre, de los antiguos oficios que abandonan allí sus piezas.

El trabaja de manera intuitiva, paso a paso cada pieza le sugiere el próximo movimiento.

Las horas de Codolar en el taller suceden como en la antigua masía dónde nació en Catalunya.

Materiales con historia, sol y lluvia sobre sus aristas, hierro y madera atravesados por la erosión son rescatados y reescritos por él.

Con una mirada respetuosa y ecológica Joan pone en primer plano el esplendor y la nobleza del olvido para exhibir
nuevamente la maravilla.

Es así, como se expresa el arte de Joan.

Un renacer permanente de la materia y el espíritu.